Entrega de las Distinciones al Diseño Social: un compromiso con el diseño y la sociedad

Hemos dado el primer paso. La primera edición de las Distinciones al Diseño Social ya es una realidad y, con ella, hemos puesto el foco en lo que de verdad importa: el diseño con impacto, con propósito, con capacidad de transformar la sociedad.

Más de 200 personas nos acompañaron en la ceremonia del pasado jueves en el Teatre El Musical de València, que no solo fue un acto de entrega de distinciones, sino una declaración de intenciones. Queda reconocido el talento y la trayectoria de Manolo Bañó y de Hilary Cottam, dos referentes que nos enseñan que el diseño es mucho más que estética: es una herramienta de cambio. Y pudimos sentirnos orgullosos del joven talento valenciano con los proyectos ejemplares de María José Bustos Garnica y de Juan Manuel Pedro Aránega, que nos demuestran que desde las escuelas valencianas de diseño y de arquitectura el futuro del diseño social está en buenas manos.

La tarde comenzó con el recuerdo de la DANA que tan duramente golpeó València haca ahora 4 meses, en palabras de la presentadora, la experta comunicadora Ona Bascuñán, «el compromiso creativo de València lo hemos visto reflejado incluso en los momentos más difíciles, y la reciente DANA nos recordó la fragilidad de nuestro entorno, pero también la fuerza de nuestra creatividad». Algo que recalcó también en su discurso el presidente de la Fundació del Disseny, Vicent Martínez: «Porque el diseño no solo resuelve problemas, también acompaña, conciencia y moviliza».

Por su parte, desde el Ayuntamiento de València, el jefe del servicio de Acción Cultural, dando la bienvenida al acto, sacó a relucir también la función del diseño que apareció tras la DANA como respuesta solidaria y recalcó esta vertiente más social del diseño confirmando que «desde la administración pública sabemos que la cultura es un motor de transformación, una herramienta que no solo refleja nuestra identidad, sino que también impulsa el cambio». Así mismo, insistió en el fuerte compromiso de apoyar iniciativas que refuercen este camino, que ayuden a que el diseño ocupe el lugar que merece dentro de nuestra cultura y nuestra sociedad.

La británica Hilary Cottam, una de las distinciones de la tarde, dedicó también parte de su agradecimiento por el reconocimiento a las víctimas de la DANA. Cottam no pudo desplazarse a València precisamente por estar inmersa en un nuevo proyecto que la tiene alejada e ilocalizable pero grabó unas palabras que fueron reproducidas en la ceremonia, un discurso en español, ya que como ella misma contó su infancia está ligada a la Comunitat Valenciana y a una casa familiar en Jesús Pobre: «Mis experiencias durante esos años fueron fundamentales para dar forma a mi trabajo», aseguró. Hilary Cottam se deshizo en halagos hacia la comunidad del diseño valenciana que tanto admira y vinculó toda esta desbordante creatividad a la artesanía y al folklore vinculado a las fiestas locales: «Se trata de una región con una rica historia del diseño, visible en todas partes, desde el legado de la artesanía hasta la inspiración deslumbrante de los arquitectos de fama mundial, y también en lo que a mí me interesa, el trabajo de los diseñadores cotidianos».

Vicent Martínez, como presidente de la Fundació del Disseny y también en representación del comité de estas distinciones, quiso destacar de sus deliberaciones que para la toma de decisión final de los reconocimientos se tuvieron en cuenta fines estratégicos y políticos, pensando en un diseño que hablase de género, de clases, y fue muy importante el impacto y la divulgación en sus selecciones. El comité de esta edición de 2025 ha estado formado por el propio Vicent Martínez y por Amparo Bertomeu, Pepe Cosín, Kike Correcher, Luis Calabuig, Lilian González, Xènia Viladàs y Anatxu Zabalbeascoa.

El diseño de las propias distinciones se desveló en la misma ceremonia, unas piezas de ónix en negro generadas a partir del símbolo de la marca de la Fundació del Disseny, diseñadas y realizadas por Matterica, estudio valenciano que une la artesanía y el diseño para crear objetos de joyería desde la tradición y lo contemporáneo.

La entrega de los reconocimientos a los dos proyectos finales de estudiantes fueron especialmente aplaudidos por el público. Así, el Trabajo Fin de Grado de Diseño Gráfico de Juan Manuel Pedro Aránega de la Escola d’Art i Superior de Disseny de Castelló, Fauna, el joguet dels parcs naturals, tutorizado por Ester Parra Sebastià, y el Trabajo Final de María José Bustos Garnica del Máster Universitario en Arquitectura Avanzada, Paisaje, Urbanismo y Diseño de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universitat Politècnica de València Entornos educativos para niños con Trastorno del Espectro Autista: criterios y estrategias de diseño arquitectónico, tutorizado por José Luis Baró Zarzo y Ana Pascual Rubio, fueron los proyectos seleccionados en esta edición de 2025 de las Distinciones al Diseño Social, dejando buena constancia del alto nivel de las escuelas de diseño y arquitectura valencianas.

Manolo Bañó fue el encargado de impartir una conferencia como colofón de la ceremonia y tras recibir, muy emocionado, la distinción de manos de Vicent Martínez y del representante del Ayuntamiento de València, Bernard Gaspar, quiso destacar la gran necesidad y valor de este tipo de proyectos para destacar el diseño social, y a lo largo de su discurso, que fue una verdadera lección magistral, recordó su viaje profesional por los caminos menos concurridos del diseño, lo que le llevó hace ahora 25 años a comenzar a trabajar con el comercio justo virando a compartir con sus alumnos la experiencia a través de un proyecto de diseño social y colaborativo que entonces se denominó Diseño para el mundo real: «La creatividad, o la capacidad de diseñar ha sido una actividad fundamental para la evolución del ser humano, y por eso hoy se extiende por todas las capas de la sociedad. Una visión superficial del diseño nos llevaría a pensar que diseñar es hacer cosas funcionales y bonitas, sin embargo, el ámbito del diseño es mucho más profundo y tiene mas que ver con los anhelos de las personas que con los objetos que estas puedan poseer. Porque como se puede ver, desde el principio de la humanidad, la creatividad y el diseño han servido para ir mejorando la vida de las personas y las comunidades, y los objetos han sido meras herramientas para conseguirlo.» destacó Bañó.

El concepto de “diseño para el cambio” fue repetido a lo largo de toda la tarde, con una definición a modo de conclusión añadida por el propio Manolo Bañó: «Ya que hoy vamos a hablar de diseño, comencemos por definirlo. Para mi diseñar significa, ante todo, transformar. Es un acto intelectual y creativo que responde a la voluntad de cambiar una situación existente por una mejor. El diseño, por lo tanto, no es un fin, sino un medio para construir soluciones reales que transformen vidas. El diseño es el medio, no es el fin.»

Como conclusión, el diseñador sentenció: «El buen diseño conduce al progreso, y el progreso es un éxito de la sociedad. Construyamos un mundo más justo, un mundo donde el diseño sea verdaderamente un catalizador de progreso humano, un mundo donde crear sea una herramienta para transformar vidas y construir un futuro esperanzador para todos, donde el diseño responda a las verdaderas necesidades de la sociedad…..porque, en definitiva, el diseño o es social, o no es diseño.»

La ceremonia se realizó gracias a la implicación y colaboración de la Concejalía de Cultura del Ajuntament de València, al Teatre El Musical (TEM) y a Caixa Popular, entidad que apuesta por el fomento de estos valores sociales impulsando así su desarrollo desde las propias escuelas de la Comunitat Valenciana.

 Otra empresa valenciana, la bodega Dominio de la Vega, sirvió el vino de honor tras el acto de entrega con sus primeros vinos ecológicos (un proyecto fuertemente vinculado a la sostenibilidad y guiado por la diseñadora Inma Bermúdez).

Deseamos agradecer personalmente la presencia del Jefe de Servicio de Acción Cultural, Bernard Gaspar; el Director de relaciones externas de IVACE de la Generalitat Valenciana, Rafael Escamilla; el Director de Responsabilitat Social, Sostenibilitat i Relacions Institucionals de Caixa Popular, Paco Alós; representantes y decano del Colegio de Diseñadores de Interior de la Comunidad Valenciana, Colegio Territorial de Arquitectos de Valencia, presidente y gerente de la Associació de Professionals del Disseny de la Comunitat Valenciana, dirección de las Escuelas Superiores de Diseño de Castelló y de València, de la Universidad CEU Cardenal Herrera, Universitat Politécnica de València, así como de los miembros del patronato de la Fundació del Disseny de la Comunitat Valenciana.
 

Gracias a todas las personas que habéis formado parte de esta edición. Seguimos adelante, con orgullo y con la certeza de que estamos construyendo algo importante.
¡Nos vemos en la próxima!
 

Fotos: Brava Studio